El podólogo es el especialista de los pies con capacidad para diagnosticar, prevenir y tratar sus afecciones. La podología ha ampliado su actuación a diferentes campos para conseguir un mejor cuidado de los pies a través de la podopediatría, la podogeriatría, la cirugía podológica, la biomecánica o la ortopodología. Tenemos que mantener una política de prevención y visitar al podólogo al menos una vez al año. Cualquier dureza, molestia o desgaste irregular del zapato puede indicar que no hay un buen equilibrio entre los pies y el resto del cuerpo.