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Transfusión de Sangre y hemoderivados. Preparación de sangre y hemoderivados para pacientes de Quirónsalud Barcelona. Programa de autotransfusiones y alternativas transfusionales. Estudios neonatales de inmunización A, B, O Rh. Estudios de inmunización en gestantes.

La transfusión sanguínea consiste en administrar sangre a un paciente. Esta sangre procede de un donante o del propio paciente. La sangre se puede transfundir como sangre total, pero, lo más frecuente, es transfundir componentes de la sangre o combinaciones de los componentes.

La transfusión de sangre y de sus derivados puede resultar fundamental para el tratamiento de pacientes en una gran variedad de situaciones médicas y quirúrgicas. Sin embargo, se debe hacer un buen uso, ya que la sangre humana es un producto escaso, de limitada disponibilidad y no exento de riesgos para el receptor.

Factores que se deben tener en cuenta para una correcta utilización de la sangre y de sus derivados:

  • Objetivo Principal: La transfusión de sangre y de sus derivados se realiza para corregir los déficit pasajeros del transporte de oxígeno (hematíes) y/o de componentes celulares o plasmáticos del sistema de coagulación (plaquetas y plasma).
  • Valoración de cada caso: Antes de transfundir se debe hacer una valoración de cada caso. Se deben tener presentes varios factores: la edad, la patología de base, la sintomatología, etc.
  • Tratamiento Personalizado: Debemos tratar a pacientes y no a resultados del laboratorio. Estos nos indican si hay anemia, plaquetopénia o alguna anomalía en la coagulación de la sangre. Ahora bien, no determinan si un paciente ha de ser transfundido o no. Los resultados de laboratorio no pueden sustituir el juicio clínico a la hora de tomar esta decisión.
  • Selección del Producto sanguíneo: Si decidimos que tenemos que realizar la transfusión, seleccionaremos el producto sanguíneo más eficaz y que comporte menos riesgo para el paciente.
  • Administración de la dosis: La dosis será la cantidad menor posible suficiente para aligerar la sintomatología o para conseguir una adecuada hemostasia. El objetivo no será llegar a una cifra analítica determinada.