• Citología exfoliativa: Método económico, poco molesto para el paciente, y rápido, que proporciona información sobre la naturaleza de la enfermedad. En Ginecología su uso rutinario permite el diagnostico precoz del cáncer cervical. El estudio se realiza en material procedente de secreciones (cérvico-vaginales, esputos, orinas) o derrames corporales.
  • PAAF (Punción Aspiración con Aguja Fina): La punción aspiración, bien directamente o guiada por ecografía o ecoendoscopia, proporciona una muestra citológica representativa de la lesión. Este procedimiento es rápido y permite elaborar diagnósticos con marcada especificidad y sensibilidad. Su realización requiere experiencia, tanto en el personal que lleva a cabo la punción como de los patólogos encargados de su interpretación. La rentabilidad es máxima cuando el procedimiento se realiza en Centros que disponen de personal especializado y que integran su actuación en un criterio multidisciplinar.
  • Biopsias: Corresponden a pequeños fragmentos tisulares obtenidos exclusivamente con finalidad diagnóstica. También se incluye bajo este término a lesiones pequeñas cuya extirpación total es posible (biopsia escisional). El procedimiento puede realizarse directamente mediante cirugía (lesiones superficiales), punciones con agujas gruesas, guiadas o no por ecografía (mama, próstata, pulmón, hígado, riñón) o bien a través de procedimientos endoscópicos (digestivos, urológicos, ginecológico, broncopulmonares).
    El uso de la nueva tecnología ha permitido alcanzar lesiones que, hasta hace muy poco tiempo, pasaban desapercibidas o estaban restringidas al ámbito quirúrgico.
  • Piezas quirúrgicas: Son los tejidos extirpados con finalidad terapéutica. En ellas se lleva a cabo el diagnóstico definitivo de la enfermedad, el grado de extensión y el estado de los márgenes de extirpación. Además, proporciona información adicional muy útil para el tratamiento posterior y el pronóstico del paciente.
  • Biopsia Intraoperatoria: Es uno de los procedimientos de Patología Quirúrgica de mayor responsabilidad por parte del patólogo y de gran utilidad para el cirujano. Su finalidad principal no es el diagnóstico preciso, in situ, de la enfermedad, sino determinar su naturaleza, benigna o maligna, y el estado de los márgenes quirúrgicos. También se utiliza para identificar posibles metástasis o el reconocimiento histológico de determinados tejidos. Para su realización contamos con las últimas tecnologías, que nos permiten una respuesta rápida y segura.
  • Inmunohistoquímica: Es un complemento diagnóstico a las citologías, biopsias y piezas quirúrgicas, que permite realizar diagnósticos más precisos y orientar el tratamiento Para llevarlas a cabo es necesario disponer de una amplia gama de anticuerpos y de maquinaria específica, para la realización simultánea de un número importante de muestras.
  • Patología molecular. En los últimos años, el uso de técnicas moleculares no solo ha permitido mejorar el diagnóstico anatomopatológico, al identificar alteraciones genéticas características o patognomónicas de distintos procesos, sino que constituye una herramienta imprescindible para el tratamiento de muy diversos procesos neoplásicos (melanoma, pulmón, mama, digestivo, sistema nervioso, etc.). En nuestro laboratorio contamos con la tecnología y experiencia necesaria para llevar a poder realizar estas determinaciones.
  • Patología autópsica. En la actualidad, la práctica de la autopsia clínica ha sido relegada por la mayor precisión diagnóstica de los procedimientos exploratorios durante la práctica clínica. No obstante, sigue teniendo su vigencia en aquellas situaciones en que el éxitus ha sobrevenido sin un diagnóstico preciso. Además, su utilidad tiene gran vigencia en la vertiente docente del hospital.