“Comer es una necesidad, pero comer de forma inteligente es un arte”

“Comer es una necesidad, pero comer de forma inteligente es un arte”

21 de diciembre de 2016

Según Alberto Aliaga, endocrino de la Unidad de Obesidad de Quirónsalud Sagrado Corazón-Obemet, "comer es una necesidad, pero comer de forma inteligente es un arte", una afirmación que conviene tener en cuenta precisamente en estas fechas de excesos. "Aunque no existen los milagros, si se cumplen unas sencillas pautas, podremos conservar una buena salud y mantener a raya nuestro peso", apunta el doctor.

Es preciso subrayar la necesidad de conservar un estilo de vida saludable durante todo el año, aunque sepamos que lo modificaremos puntualmente en estos días. Una dieta equilibrada pasa por un consumo de alimentos lo más variado posible, "pero, eso sí, en su justa medida", incide el especialista.

Para Felipe Del Valle, nutricionista de la Unidad de Obesidad, "resulta fundamental alimentarnos adecuada, moderada y ordenadamente, lo que significa hacer cinco comidas al día (desayuno, media mañana, almuerzo, merienda y cena)".

Según Del Valle, si en lugar de llegar a la cena de Nochebuena, Navidad o Nochevieja sin haber probado bocado desde el almuerzo, merendamos, por ejemplo, una macedonia a base de yogur desnatado con una pieza de fruta, evitaremos las ansias compulsivas de arrasar con todo lo que nos pongan por delante al sentarnos a la mesa.

Un buen consejo sería servirnos en nuestro plato pequeñas porciones de los diferentes aperitivos dispuestos para compartir en lugar de ir comiendo directamente de ellos, de este modo podemos controlar mejor la cantidad total que ingeriremos. Debemos comer lentamente para sentirnos saciados precozmente y evitar digestiones pesadas por haber comido más de lo necesario. Y finalmente un pequeño truco para reducir el consumo calórico total sería ir alternando entre cada copa de vino, cerveza o cava, alguna bebida sin calorías como el agua o los refrescos edulcorados (zero, light, etc.), apunta Del Valle.

En cualquier caso, según el doctor Aliaga, no hay que obsesionarse, ya que "ingestas hipercalóricas puntuales no suelen tener repercusión importante en el peso".

Navidad segura para alérgicos e intolerantes

Hasta el 17% de la población europea podría sufrir algún tipo de alergia a alimentos, ya que el riesgo de reacciones aumenta en estas fechas por las comidas en grupo y fuera de casa. Según la alergóloga del hospital Quirónsalud Infanta Luisa, la doctora María Antonia Ortega Camarero, estas reacciones aparecen con mayor frecuencia en los más pequeños.

Por ello la doctora Ortega Camarero propone una serie de medidas que nos ayudarán a tener unas navidades seguras en cuanto a la alimentación:

1. En primer lugar es importante informar a la persona encargada de la comida de que nosotros o nuestros hijos somos alérgicos o intolerantes. Las alergias más frecuentes son al huevo, leche, frutos secos, pescados, mariscos, legumbres y frutas.

2. Hay que leer cuidadosamente el etiquetado de los productos, identificando alérgenos que pueden estar ocultos en forma de aditivos.

3. Si somos los encargados de preparar la comida, debemos adaptar el menú a alimentos que puedan comer todos los invitados, tanto alérgicos como intolerantes.

4. En la cocina utilizaremos utensilios diferentes para cocinar los alimentos de las personas con alergias alimentarias, por riesgo de contaminación cruzada.

5. La inhalación de humos y vapores procedentes del cocinado de algunos alimentos como el marisco y el pescado puede provocar reacciones en los alérgicos, que deberán permanecer fuera de la cocina mientras se cocinan estos alimentos.

6. A la hora de presentar los alimentos es importante servir la comida en platos individuales y no colocar fuentes comunes para ensaladas o pan. Así evitamos el riesgo de que algún comensal favorezca el contacto del niño o adulto con el alimento que le cause la alergia o intolerancia.

7. Todos los restaurantes están obligados a tener una carta de alérgenos en la que se indique, mediante iconos, al menos los 14 alérgenos más frecuentes. Sin embargo debemos asegurarnos de que no se emplean aditivos alimentarios que contengan el alérgeno. Ante cualquier duda debemos preguntar para estar seguros de que esté excluido.

8. Es recomendable preguntar a los padres antes de ofrecer alimentos a los niños. La mayoría son conscientes de su alergia, pero los más pequeños pueden no saberlo y, aunque el alimento sea apto para su edad, hay que tener el máximo cuidado.

Finalmente, la doctora María Antonia Ortega Camarero apunta que "en el caso de que por equivocación se consuma algún alimento al que se es alérgico, hay que administrar de forma rápida la medicación de rescate", y recuerda que "todos los alérgicos a alimentos deben tener siempre a mano los autoinyectores de adrenalina y deben estar adiestrados en su manejo, así como deben ser capaces de identificar los signos que indican que están sufriendo una anafilaxia. Para reacciones más leves, como la urticaria, los pacientes han de tener prescrito por su médico alergólogo el tratamiento de rescate, como antihistamínicos y corticoides".



Current events

Current events

Mantente informado con las últimas noticias de nuestros hospitales y avances en salud directamente desde nuestra sección de Actualidad.