Los estudios sobre el tratamiento de la DMAE van encaminados al aumento del plazo entre las inyecciones intravítreas

Imagen en alta resolución. Este enlace se abrirá mediante lightbox, puede haber un cambio de contextoPACO MARTÍN LEALHoy se ha celebrado en el Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón el primer "Challenge Quirónsalud de Retina", un encuentro que ha reunido a un nutrido grupo de especialistas en oftalmología de diferentes hospitales andaluces para poner en común las distintas patologías relacionados con la mácula. El encuentro has sido inaugurado por el doctor Francisco Martín Leal, codirector del Servicio de Oftalmología de Quirónsalud Sagrado Corazón- CAO, que ha destacado la importancia de la celebración de este tipo de encuentros profesionales para compartir conocimientos y estar al día de los últimos avances en el campo de la oftalmología.

Según explica la doctora Carmen Gutiérrez Rizo, responsable de la Unidad de Retina de Quirónsalud Sagrado Corazón-CAO y organizadora del Challenge, este formato ayuda a dinamizar el encuentro. Los distintos ponentes han ido presentando sus casos y planteando tres preguntas dirigidas a los asistentes con el fin de hacerlo más interactivo y fomentar la participación, con la aportación de distintos puntos de vista sobre la resolución de los casos clínicos. Igualmente, continúa la especialista se trataba de "plantear los problemas que se nos presentan en la práctica clínica diaria, tanto diagnósticos, como terapéuticos; y discutir sobre ellos con la finalidad de aprender o compartir conocimientos, sobre todo en los casos más complejos".

En el Challenge se han presentado casos clínicos de gran complejidad que han supuesto un reto para el oftalmólogo, centrándose en esta ocasión en patologías que afectan a la mácula como la degeneración macular asociada a la edad (DMAE), tumores oculares, telangiectasias maculares o coriorretinopatía central serosa entre otras.

Imagen en alta resolución. Este enlace se abrirá mediante lightbox, puede haber un cambio de contextoGUTIERREZ_RIZO_CARMEN_2Este enlace se abrirá en una ventana nuevaSegún indica la doctora Gutierrez Rizo, la investigación en el campo de la oftalmología es fundamental y se está avanzando mucho tanto en el campo diagnóstico como en el terapéutico. Así, en el campo diagnóstico, comenta, "la inteligencia artificial se está desarrollando de manera especial (avanzados software que ayudan al diagnóstico); por su parte en el campo de los tratamientos la terapia génica está sufriendo un importante desarrollo, así podríamos llegar en el futuro a inyectar en el ojo del paciente un gen modificado que cure o mejore la enfermedad". Esto último, apostilla, "ya se realiza en una enfermedad rara denominada Amaurosis congénita de Leber". En cuanto a las nuevas técnicas, comenta la especialista, "los láseres y la distinta tecnología que empleamos son más precisos y minimizan los daños en el paciente".

Sobre la DMAE

Es una enfermedad que afecta a una zona de la retina llamada mácula, que es la encargada de la visión central y de los detalles finos (lectura, rasgos de las personas y de las cosas), produciéndose un deterioro de esta que conlleva a una pérdida de visión. Se suele producir en pacientes a partir de los 50 años, por eso es denominada "asociada a la edad".Imagen en alta resolución. Este enlace se abrirá mediante lightbox, puede haber un cambio de contextofauli

La prevalencia de la enfermedad en España es de 5,3% en la población mayor de 50 años, aumentando a un 10,8 en los mayores de 75 años. Su incidencia va en aumento -incremento de la esperanza de vida de la población- y por tanto, suscita mucho interés e investigación por parte de la industria farmacéutica que redundará en el beneficio del paciente.

La DMAE húmeda (la pérdida de visión central es más rápida y se produce como consecuencia del crecimiento de nuevos vasos sanguíneos en la mácula que producen sangrado) se trata con inyecciones intravítreas de antiangiogénicos. Existen estudios en marcha sobre dispositivos de liberación lenta, que aún no están aprobados y que disminuirían el número de inyecciones, y otros estudios finalizados sobre medicamentos, que sí se aplican en la actualidad que alargan el intervalo de tratamiento entre inyección e inyección, lo que supone también un menor número de pinchazos para el paciente.

La especialista concluye anunciando que hay nuevos fármacos que están en fase de estudio, que "esperemos que estén pronto disponibles para tratar a nuestros pacientes".

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