La hipófisis es un apasionante campo en el que trabajamos, codo con codo, varios especialistas médicos: oftalmólogos, endocrinólogos y neurocirujanos.

Muchas lesiones de la hipófisis son de naturaleza tumoral y no hay más remedio que extirparlas mediante una operación quirúrgica.
Antiguamente se tenía que abrir una ventana en el hueso de la cabeza (craniotomía) para poder acceder a la lesión. Hoy día raramente un paciente necesita que se le realice una craniotomía para solucionar el problema.

La mayoría de las lesiones de la hipófisis se extirpan mediante microcirugía, llegando a la glándula a través de la nariz: se atraviesa las fosas nasales de forma directa para acceder a la silla turca, que es donde se aloja esta glándula. Más aún, en la última década se está consolidando la utilización de la endoscopia transesfenoidal para la resección de los adenomas de hipófisis, una cirugía menos invasiva si cabe que la microcirugía, que es la que se utiliza en el Hospital Quirónsalud Murcia para solucionar los problemas de esta glándula.