El cáncer de colon es el tumor maligno con más incidencia en Aragón. En 2022, se registraron 1.271 casos, según los datos aportados por la Asociación Española contra el Cáncer (AECC). Ante esta situación, el diagnóstico precoz se convierte en un gran aliado frente a esta enfermedad, que afecta a hombres y mujeres, especialmente a partir de los 50 años o cuando existen antecedentes familiares de primer grado.

img_cancer_colon_Huescaimg_cancer_colon_HuescaEl Hospital de Día Quirónsalud Huesca recomienda "adelantarse" al cáncer de colon a través de diferentes pruebas de prevención, como el test de sangre oculta en heces y la colonoscopia. Y, para ello, cuenta con la última tecnología. La tasa de curación en estadios iniciales es muy alta, mayor del 90%, mientras que, cuando el cáncer se ha diseminado hacia los tejidos, los órganos circundantes o los ganglios linfáticos regionales, el pronóstico empeora. "No obstante, con los tratamientos actuales se consiguen resultados positivos que superan el 70%", apunta el doctor Santos Santolaria.

El especialista en aparato digestivo y gastroenterología en el centro de la capital oscense destaca que "lo más importante es que se puede prevenir". Así, tal y como explica, "la mayoría de los cánceres localizados en el colon y recto se desarrollan a partir de una lesión precursora que es el pólipo colorrectal. Estos pólipos pueden estar en el colon durante años antes de que avancen a cáncer sin presentar síntomas, especialmente al principio. Sin embargo, cuando aumentan de tamaño, pueden sangrar de forma leve. Un signo que es posible detectar mediante un método muy sencillo, como es el test de sangre oculta en heces".

Si este es positivo o el paciente tiene síntomas, se lleva a cabo una colonoscopia. "Disponemos de equipos de endoscopia avanzada y realizamos la colonoscopia con sedación profunda asistida por un anestesista, lo que mejora el diagnóstico, la tolerancia y la seguridad de los pacientes", asegura el doctor. En el caso de que se aprecien pólipos, se pueden extirpar con la técnica de polipectomía endoscópica y, de esta manera, se interrumpe la evolución hacia un tumor maligno. "La extirpación de los pólipos colorrectales que miden más de 1 cm -tamaño de un guisante- ha demostrado que puede reducir el riesgo de la enfermedad, y, por otro lado, las pruebas de prevención indicadas han puesto de manifiesto que ayudan a disminuir hasta un 30% la mortalidad asociada a este tipo de cáncer", afirma el especialista.


Coordinación entre los centros de Huesca y Zaragoza

Los hospitales de Huesca y Zaragoza de Quirónsalud trabajan de forma coordinada para ofrecer una atención integral basada en la excelencia. "La existencia de unidades multidisciplinares mejora todo el proceso asistencial", asegura el doctor. "Esto nos permite elegir la estrategia más adecuada de tratamiento según la localización y extensión del cáncer y, por otra parte, facilita al paciente el acceso a los diferentes especialistas que puede necesitar a lo largo del tiempo", añade.

Quirónsalud Huesca apuesta por la innovación con medios de última generación. Entre otros, la incorporación de equipos con imagen en alta resolución y la cromoendoscopia óptica han mejorado la identificación de los pólipos. Igualmente, el centro ha integrado recientemente un sistema de irrigación de agua e insuflación con CO2, que facilitan el desarrollo de las pruebas diagnósticas, disminuyendo las molestias abdominales en los pacientes y favoreciendo su rápida recuperación.


Cómo lo podemos prevenir y posibles síntomas

Para reducir el riesgo de esta enfermedad, el especialista también señala que es importante abandonar hábitos tóxicos, como el tabaco o el consumo de alcohol, y llevar a cabo una alimentación saludable disminuyendo los azúcares refinados, las grasas animales y las carnes rojas y procesadas. En su lugar, es bueno aumentar el consumo de verduras, hortalizas y granos integrales. Del mismo modo, resulta positivo evitar el sobrepeso y mantener una actividad física regular.

Por otro lado, la presencia de sangre en las heces, un cambio en los hábitos de deposición (diarrea o estreñimiento), sufrir dolor abdominal o la aparición de anemia son señales de alerta a las que es clave prestar especial atención y consultar con un especialista. Pero, como puntualiza el doctor Santolaria, "los pólipos y el cáncer colorrectal no siempre causan síntomas, sobre todo al principio. Por esta razón, los análisis periódicos para la detección precoz son decisivos".

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