La actuación del especialista en Medicina Interna se centra en:

  • Atención del paciente sin diagnóstico preciso.
  • Atención del paciente pluripatológico: del que se realiza un seguimiento completo, coordinando la intervención de distintas especialidades, repetición de pruebas diagnósticas y posibles interacciones de fármacos.
  • Atención a las personas de edad avanzada en situación de enfermedad aguda o agudizada: por su visión global de todos los campos de la medicina, el internista se erige en un profesional capacitado para abordar de forma integral los problemas médicos de las personas mayores.
  • Abordaje integral del paciente afectado de enfermedades con manifestaciones multiorgánicas, como las infecciosas, enfermedades autoinmunes, sistémicas, de riesgo vascular (obesidad, hipertensión, obesidad, diabetes, hipercolesterolemia), enfermedades metabólicas, patología hepática y sospecha tumoral, entre otros.
  • Estudio, diagnóstico y tratamiento del riesgo cardiovascular, con especial interés en displemias, hipertensión arterial, obesidad, diabetes, síndrome metabólico, tabaquismo, etc., realizando estratificación de dicho riesgo.
  • Coordinación de la Unidad de Chequeos Médicos.