Bypass Gástrico

El Bypass Gástrico, es la intervención de obesidad más utilizada y con más de 25 años de historia, sobre las que se comparan todas las demás operaciones.

Consiste en reducir la capacidad gástrica creando un pequeño reservorio desde donde la comida se deriva directamente al intestino delgado. Impide que el paciente pueda comer los alimentos de forma rápida además de conseguir que éstos no sigan el curso normal a lo largo del aparato digestivo.

El paciente siente saciedad (es decir "se encuentra lleno") con menos comida. La pérdida de peso se debe a la menor ingesta de comida y a la mala absorción del alimento ya que este llega al intestino sin pasar por el duodeno.

¿Qué pacientes son candidatos a realizar un bypass gástrico?

Esta técnica está recomendada a pacientes con un IMC superior a 50 y que tienen malos hábitos alimentarios como picar entre horas, costumbres golosas, y sobre todo cuando existe diabetes asociada a la obesidad.

Recomendaciones dietéticas después de la cirugía

Durante las 4 primeras semanas el paciente debe tomar una dieta líquida y semilíquida, en la que se incluyen suplementos alimenticios. Posteriormente podrá tomar una dieta equilibrada, comer cinco veces al día, evitando las comidas fuera de horas.

Todas las técnicas por via laparoscópica

La cirugía laparoscópica es uno de los mayores avances de la cirugía del siglo XX. Ésta consiste en operar mediante un instrumental específico y una óptica introducida en el abdomen a través de una microcámara de alta resolución, que transmite la imagen a un monitor de televisión. Para realizar esta técnica quirúrgica se utilizan pequeñas heridas de entre medio y un centímetro.

Las ventajas de realizar la el bypass gástrico por laparoscopia son:

  • Rápida recuperación postoperatoria
  • Rápida recuperación de la función intestinal
  • Reducción del dolor