La etiología del problema es multifactorial (causas biológicas, médicas, circadianas, de neurodesarrollo, conductuales) y existen factores predisponentes, precipitantes y perpetuantes que deben ser analizados y bien delimitados mediante un análisis funcional de la situación para llegar a un diagnóstico preciso. Los datos de la bibliografía científica muestran claramente un fuerte impacto del Insomnio Infantil en el niño con afectación diurna a nivel anímico, cognitivo, conductual, de salud y en la calidad de vida del niño. Además provoca una disfunción familiar e incluso una repercusión sobre la calidad de vida y estado anímico de los padres.

En este sentido existen estudios que muestran una estrecha relación entre el insomnio infantil y la depresión en las madres. Por otro lado estudios longitudinales muestran que el insomnio en la infancia puede continuar en la edad preescolar, escolar e incluso puede llegar a cronificarse de no implementar a tiempo un tratamiento adecuado.

El tipo de tratamiento en el Insomnio Infantil dependerá siempre de la causa que lo provoca por lo que es fundamental realizar un correcto diagnóstico antes iniciar cualquier estrategia terapéutica. La etiología del insomnio pediátrico puede responder a causas médicas (intolerancias alimentarias, reflujo gastroesofágico, dolor,…), alteraciones del sueño (SPI infantil, apneas, …) o psicológicas (trastornos de ansiedad, miedos,…).