Un episodio compatible con un Accidente Isquémico Transitorio (AIT) como un cuadro sincopal, una pérdida súbita de visón en un ojo, un episodio de pérdida de fuerza en las extremidades, etc, nos avisa en muchas ocasiones de la existencia de un problema vascular grave: la estenosis Carotídea.

La simple realización de un eco-Doppler carotídeo, prueba sencilla, no invasiva y con alta especificidad y sensibilidad en manos expertas, puede revelar la existencia de una estenosis Carotídea significativa, potencialmente solucionable mediante las modernas ténicas quirúrgicas y endovasculares.

Evaluar y tratar correctamente dichas lesiones puede evitar en muchos casos eventos cerebrovasculares graves irreversibles.