Las irritaciones en la piel de los recién nacidos es una de las patologías más comunes ya que la piel de los bebés es naturalmente más sensible que la de los adultos, y puede sentirse seca e irritada con mayor facilidad.

Las rozaduras en la zona del pañal hasta irritación y sequedad son las más comunes, pero entre los más pequeños también se puede dar la Sudamina o Miliaria. Se trata deuna erupción que con frecuencia aparece en la piel de algunos niños, sobre todo recién nacidos y menores de un año, causada por la obstrucción de los conductos de las glándulas del sudor en la piel. El sudor queda atrapado bajo la piel causando pequeñas erupciones.

Estas erupciones se manifiestan mediante la aparición de pequeños granos rojos o blanquecinos y afecta a las zonas de la piel donde son más abundantes las glándulas sudoríparas, es decir, la frente, cara, cuello, pecho o espalda. Aunque es conocida como erupción por calor y está relacionada con las altas temperaturas, no quiere decir que sea exclusiva del verano.

Esta afección de la piel es más habitual en menores de 2 años porque la dermis todavía tiene dificultades para desprenderse del calor sobrante y transpirar como hace la piel de los niños de mayor edad o los adultos. En caso de niños con piel atópica, sí es posible que haya más irritación en las zonas afectadas y que ante cualquier factor externo, pueda dar lugar a una dermatitis.

La sudamina es una alteración benigna y transitoria que no requiere de un tratamiento especifico, aún así es importante prevenirla. Desde la Asociación Española de Pediatría se recomienda evitar una sudoración excesiva que pueda favorecer la aparición de la sudamina. Algunas de las recomendaciones son:

  • No abrigar al niño en exceso
  • No utilizar ropa ajustada
  • Mantener una higiene adecuada
  • Mantener unos buenos cuidados de la piel del bebé: limpieza e hidratación
  • Evitar el uso de productos como talco o cremas muy espesas que puedan obstruir más los poros

¿Cómo debemos tratar la sudamina?

En el caso de que el bebé presente algún sarpullido es importante facilitar la traspiración de la piel para que desaparezcan los granitos mediante los siguientes pasos:

  • Quitarle la ropa y dejar airear las zonas con granitos
  • Refrescar la habitación y trasladar al bebé a una zona con menor temperatura
  • Si los granos no disminuyen, darle un baño.
  • Si después de seguir estas recomendaciones el bebé no mejora será necesario llevarlo al pediatra para valore el estado y el grado del sarpullido.