Consejos salud cardiovascularConsejos salud cardiovascular¿Sabías que nuestros hábitos de vida y rutinas diarias repercuten en la salud de nuestro corazón? Además, es importante tener en cuenta que, a día de hoy, las enfermedades del sistema circulatorio son el primer motivo de muerte en España. En 2020, murieron 119.853 personas por causa cardiovascular, un 24,3% de los fallecimientos totales, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Por estos motivos, hablamos con el doctor Arturo Andrés, especialista en cardiología de Quirónsalud Zaragoza, sobre cómo cuidar nuestro corazón. Estos son los consejos que nos ha dado para evitar este tipo de patologías:

1. Llevar una rutina de vida sana

En general es fundamental llevar un estilo de vida saludable y minimizar así la posibilidad de padecer determinados factores de riesgo que predisponen al paciente a sufrir estas enfermedades. De hecho, este tipo de problemas se manifiestan principalmente en una peor calidad de vida. La merma de nuestras capacidades, el cansancio precoz, el sobrepeso, la presencia de signos de insuficiencia venosa crónica o los problemas dermatológicos son algunas de las señales de alerta que indican que algo no funciona bien.

Los hábitos básicos para mantener en forma nuestro corazón son llevar una dieta equilibrada donde los excesos sean ocasionales y evitar el consumo de tabaco y alcohol, así como realizar actividades físicas de manera regular.

En aquellos pacientes que hayan sufrido previamente alguna enfermedad de este tipo todos estos hábitos han de ser más rigurosos y, en ocasiones, deben estar controlados por un profesional médico, dietista o entrenador personal.

2. La importancia de la alimentación

Afortunadamente, la dieta mediterránea en España es la piedra angular de nuestra alimentación. Simplemente continuar alimentándonos de esta forma, en la que la variedad y el equilibrio son los protagonistas, es suficiente.

Entre los ingredientes básicos encontramos los vegetales, la fruta, la carne o el pescado. Asimismo, es importante evitar el exceso de grasas, los productos procesados, la bollería industrial y las bebidas azucaradas.

3. Deporte regular tres o cuatro veces a la semana

Hay que tener en cuenta que la actividad física facilita el trabajo del resto de acciones que debemos realizar para que nuestra salud cardiovascular sea buena. Es decir, practicar deporte al menos tres o cuatro veces por semana en sesiones de una hora contribuye a que nuestro peso sea correcto, la dieta no tenga que ser tan rigurosa y, además, permite controlar mejor nuestros niveles de azúcar, tensión y colesterol.

Igualmente, con el deporte liberamos endorfinas, un método antiestrés muy eficaz. En este sentido, hay que destacar que esa ansiedad que sufrimos a diario en nuestra sociedad repercute de forma negativa en nuestra salud cardiovascular.

4. Realizar revisiones y un chequeo médico cardiológico cada cierto tiempo

Con respecto a la población en general, personas asintomáticas con un riesgo cardiovascular bajo o moderado, se recomienda realizar una primera revisión a los 40 años y, al menos, con una frecuencia bianual. Por supuesto, si aparece cualquier signo de alarma, hay que acudir al médico de forma prematura.

En el caso de pacientes que sufren estas patologías, el seguimiento ha de realizarse en función del grado de enfermedad que tenga, así como del adecuado control de sus factores de riesgo cardiovascular. Tras un evento agudo, en pacientes estables y bien controlados, lo ideal sería una revisión al mes del ingreso y posteriormente semestral, manteniendo después una revisión anual.

Por último, hay que tener presente a la población joven que realiza actividades físicas con frecuencia. En estas circunstancias, se aconseja realizar un chequeo básico para descartar las causas cardiológicos más frecuentes de muerte súbita en edades más tempranas.