Parece que en la búsqueda de alternativas aparentemente menos dañinas al tabaco convencional, muchas personas han recurrido al tabaco de liar y a los vapeadores. Sin embargo, según las declaraciones de la Dra. Hernández, estas opciones no son tan seguras como algunos creen.


El tabaco de liar es más peligroso de lo que se piensa

A menudo se sostiene la creencia errónea de que el tabaco de liar es una opción más saludable que el tabaco convencional. Sin embargo, los datos revelan una verdad preocupante. "El tabaco de liar puede contener hasta un 70% más de nicotina, un 86% más de alquitrán y un 84% más de monóxido de carbono en comparación con su contraparte convencional", afirma la doctora.

El tabaco de liar no está sujeto a las mismas regulaciones y controles de contenido que el tabaco convencional, lo que conduce a una composición más aleatoria y peligrosa. Estudios realizados en Barcelona, que involucraron a 2500 fumadores, demostraron que aquellos que consumían tabaco de liar tenían concentraciones más altas de nicotina en la saliva, a pesar de fumar menos unidades al día. Esto se debe a la falta de control en la composición del tabaco de liar, la ausencia de filtro y la ausencia de estructuras de ventilación obligatorias presentes en el tabaco convencional, lo que aumenta la exposición al monóxido de carbono.


Gran impacto en los pulmones

El tabaco, en cualquiera de sus formas, es altamente perjudicial para el sistema respiratorio y puede provocar una variedad de enfermedades. Es la principal causa de cáncer de pulmón, una enfermedad que a menudo se diagnostica en etapas avanzadas debido a la falta de síntomas notorios en sus primeras etapas.

Pero Carmen Hernández insiste en el gran número de enfermedades asociadas a esta práctica: "Además del cáncer de pulmón, el tabaco es un factor de riesgo clave para el desarrollo de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)". Se trata de una afección caracterizada por un estrechamiento progresivo de las vías respiratorias, lo que conduce a una disminución gradual de la capacidad pulmonar. "El EPOC es irreversible y se agrava con el tiempo si no se abandona el hábito de fumar", finaliza. El tabaco también debilita el sistema inmunológico del sistema respiratorio, aumentando el riesgo de infecciones respiratorias y neumonías.


Los peligros del vaperQué peligro tiene fumar para la saludQué peligro tiene fumar para la salud

En los últimos años, los cigarrillos electrónicos, o vapeadores, han ganado popularidad. Sin embargo, la doctora Hernández advierte que estos dispositivos no son inofensivos. Aunque contienen menos nicotina que los cigarrillos tradicionales, los vapers utilizan líquidos que pueden ser dañinos para los pulmones.

En 2019, Estados Unidos registró casos de inflamación pulmonar grave relacionados con el vapeo, lo que llevó a la hospitalización y la muerte de algunos usuarios. Posteriormente se identificó la causa de esta inflamación y se llegó a la conclusión de que existía un depósito de acetato de vitamina E en los pulmones de los afectados.

Además, los vapeadores pueden producir otros problemas pulmonares relacionados con la neumonía: neumonitis por hipersensibilidad, neumonía eosinofílica, neumonía organizada y neumonía lipoidea. "El uso de saborizantes en los líquidos de vapeo también pueden liberar sustancias tóxicas cuando se calientan, lo que agrava los riesgos para la salud", expone Carmen Hernández.

Por tanto, la neumóloga se reafirma en la necesidad de disminuir esta práctica tan de moda entre la juventud últimamente: "Es cierto que los vapers contienen menos nicotina que un cigarrillo convencional, pero utiliza otros compuestos en su funcionamiento que son tóxicos a nivel del aparato respiratorio, a lo que hay que añadir que se desconoce también si las altas temperaturas que origina el vapeo a nivel de las vías respiratorias puede potenciar aún más el daño pulmonar".