Unidad de Reproducción asistida

¿Qué es la reproducción asistida?

La reproducción asistida es una unidad derivada de ginecología que se centra en el desarrollo y en la aplicación de técnicas para facilitar el embarazo en pacientes con dificultades para concebir de forma natural. Además, permite preservar la fertilidad de aquellas personas que planean tener hijos en el futuro.

¿Qué estudia la reproducción asistida?

La especialidad médica enfocada a la fertilidad se centra en el estudio de las causas que dificultan el embarazo, así como en el desarrollo de técnicas para conseguir la gestación. Esta unidad abarca cuatro áreas diferenciadas:

• Diagnóstico: realiza pruebas genéticas, análisis clínicos y exámenes físicos para detectar las causas que provocan la infertilidad.
• Preservación de la fertilidad: permite congelar óvulos, espermatozoides o tejido reproductivo para tener la posibilidad de intentar la gestación en un futuro. Para ello, se utiliza la técnica de criopreservación.
• Tratamientos con fines reproductivos: terapias específicas para tratar la infertilidad y propiciar el embarazo.
• Acompañamiento psicológico: el cuidado de la salud mental de las mujeres que se someten a procesos de reproducción asistida es fundamental para que mantengan su equilibrio personal.

¿A qué pacientes está dirigida?

La reproducción asistida está enfocada al tratamiento de pacientes estériles que buscan el embarazo. Esta especialidad también se dirige a aquellas personas que por su situación personal no pueden lograr el embarazo de otra forma, como madres solteras o parejas de mujeres.

Técnicas, procedimientos y métodos diagnósticos

En los últimos años, la reproducción asistida ha avanzado mucho y ofrece métodos diagnósticos muy precisos y técnicas reproductivas con un alto porcentaje de éxito. Actualmente, se puede hablar de tres métodos:

• Inseminación artificial: tras un proceso de estimulación ovárica, se introduce una muestra de semen en el útero en el momento en que se estima que se liberará un óvulo. El semen, que puede ser de la pareja o de un donante, se procesa previamente para seleccionar los espermatozoides con más posibilidades de fecundar.
• Fecundación in vitro (FIV): se seleccionan los gametos masculinos más adecuados y se extraen los ovocitos, de la futura madre o de una donante, después de una estimulación ovárica. En el laboratorio, se deposita una gran cantidad de espermatozoides seleccionados junto al ovocito y se espera a la fecundación. Cuando los embriones han comenzado a dividir sus células, se introducen en el útero con un catéter, normalmente en el día 3 o en el día 5.
• Inyección intracitoplasmática (ICSI, por sus siglas en inglés): es una variante de la FIV que ofrece mejores resultados, ya que se introduce un espermatozoide seleccionado dentro del óvulo y se guarda en una incubadora con temperatura, humedad y concentración de gases similares a las del cuerpo humano.