El empleo de la plataforma robótica Da Vinci supone un importante avance en el tratamiento de las enfermedades oncológicas en Urología. Al ser una técnica quirúrgica mínimamente invasiva proporciona excelentes resultados estéticos añadiendo la ventaja de ser altamente eficaz a la hora de resolver la patología oncológica y reconstructiva con los mejores resultados funcionales. Esta tecnología permite también a los cirujanos abordar regiones con anatomía compleja de difícil acceso con otras técnicas, mejorando la precisión quirúrgica.

Ventajas de trabajar con un robot Da Vinci en urología

El robot Da Vinci permite al cirujano llevar a cabo procedimientos quirúrgicos de una forma muy precisa. Guiado por la experiencia y conocimiento del especialista, el robot supone una herramienta excelente, ya que es capaz de hacer que los movimientos del cirujano sean mucho más precisos, evitando el mínimo temblor e incluso permitiendo ampliar la rotación de la muñeca humana hasta casi 360º.


Cirugía mínimamente invasiva. Se realizan incisiones más pequeñas y precisas

Reducción del tiempo de recuperación y el dolor

Preservación de la funcionalidad. Especialmente en la cirugía prostática, el robot permite conservar el tejido sano y preservar los nervios que no están afectados por el tumor. De esta manera, recuperar la continencia urinaria y la función eréctil es más rápido que con otras técnicas quirúrgicas.

Cirugías indicadas para la utilización de Robot Da Vinci

Las ventajas de la cirugía robótica, para los pacientes y los cirujanos, hacen que cada vez sean más los tratamientos quirúrgicos que se llevan a cabo con esta técnica. En Urología, el robot se utiliza en cáncer de próstata, cáncer de riñón, cáncer de vejiga, prolapso genital, cirugía reconstructiva de la vía urinaria, entre otras.

La cirugía asistida por robot, como el Da Vinci, exige conocimiento, experiencia, formación y entrenamiento.