Quirónsalud

Saltar al contenido

Blog de la Dra. Carmen Ponce de León, de Trastornos de la Alimentación de Hospital U. Quirónsalud Madrid

  • Emociones, alimentación y trastornos de conducta alimentaria

    Muchos de nosotros hemos picado de la nevera o de la despensa en momentos de nerviosismo, no tanto por apetito como por paliar cierto malestar emocional.
    Tampoco es extraño que, ante una mala noticia o en días de tristeza, reaccionemos comiendo menos. De ahí que se diga "se me ha cerrado el estómago" cuando se está pasando un mal momento.

    emociones_alimentosemociones_alimentos


    La conducta alimentaria tiene una estrecha relación con la regulación emocional, es decir, con la capacidad de retornar a la calma después de pasarlo mal psicológicamente. Y los problemas emocionales pueden llevar tanto a excesos como a disminución de la ingesta.

    Así, las personas con trastornos de alimentación presentan a veces conductas impulsivas (ej. vómitos, atracones…) que podrían atenuarse si el paciente dispusiera de habilidades para regular sus emociones. Es común que las conductas alimentarias patológicas se conviertan en mecanismos de regulación emocional "disfuncionales" -que calman cierto malestar, pero generan otro tipo de problemas psicológicos-.

    Tratamientos como la Terapia Dialéctica Conductual (TDC o por sus siglas en inglés DBT: Dialectical Behavior Therapy) se orientan a dotar a los pacientes de recursos para identificar emociones negativas y a continuación corregir las respuestas disfuncionales a ellas. La TDC fue desarrollada por una psicóloga estadounidense, Marsha Linehan para tratar a algunas personas con el trastorno límite de personalidad. Dada su eficacia, ha ido modificándose esta terapia para adaptarse a otras condiciones patológicas.

    En el caso de los trastornos de alimentación, por los motivos explicados anteriormente, este tipo de tratamiento tiene especial interés. Bankoff y otros autores (1) analizan los primeros estudios con esta técnica psicoterapéutica, concluyendo que es un tratamiento prometedor en trastornos de alimentación y que se ha demostrado útil para disminuir conductas alimentarias disfuncionales.

    Es importante disponer de conocimientos acerca de diferentes tratamientos, médicos y psicoterapéuticos, para poder adaptarse a la diversidad de las personas que consultan por problemas con la alimentación y así ofrecerles las mejores opciones terapéuticas. En la actualidad es fundamental tener en cuenta la relación entre emociones y alimentación porque utilizar tratamientos orientados a la regulación emocional puede aportar grandes beneficios terapéuticos.

    (1) Eat Disord. 2012;20(3):196-215. doi: 10.1080/10640266.2012.668478.
    A systematic review of dialectical behavior therapy for the treatment of eating disorders. Bankoff SM, Karpel MG, Forbes HE, Pantalone DW.

    Mario De MatteisEste enlace se abrirá en una ventana nueva

  • Anorexia Nerviosa, Bulimia y Obesidad: hacia la comprensión de los mecanismos cerebrales

    ¿Qué sucede en el sistema nervioso de una persona que sufre trastornos de conducta alimentaria?

    Todos hemos oído hablar de neurotransmisores, sustancias químicas que se producen en el interior de las neuronas y sirven para llevar o conducir señales entre ellas. Se les llama también "mensajeros" y "mediadores".

    neurotransmisorneurotransmisor


    En el ejemplo más elemental: si ordeno a mis dedos que cojan un lapicero, una serie de moléculas (neurotransmisores) saldrá de una neurona de mi cerebro para dirigirse a las siguientes. Éstas a su vez transmitirán el mensaje a las próximas con sus propios neurotransmisores, haciendo posible que la orden alcance su destino (los dedos de nuestro ejemplo) a través de una red de células: una especie de vía o camino que llamamos circuito. En ese proceso habrán participado múltiples células nerviosas alineadas que se habrán comunicado por medio de neurotransmisores hasta conseguir que lo que fue un impulso o un deseo se convierta en un acto.

    Los neurotransmisores son muy diferentes entre sí, y de muchos de ellos lo ignoramos aún casi todo. Otros, en cambio, han sido y siguen siendo muy estudiados.

    En la anorexia, la bulimia nerviosa y la obesidad se sabe que algunas moléculas neurotransmisoras como la serotonina (que tiene también relación con el estado de ánimo, la ansiedad y las obsesiones) y la dopamina (implicada en la motivación, la búsqueda de recompensa y la actividad motora) se encuentran especialmente alteradas.

    ¿Significa esto que conocemos de forma precisa en qué consisten esa alteraciones? ¿Somos capaces de corregirlas definitivamente a través del uso de alguna sustancia? La respuesta es que no, que todavía estamos muy lejos de encontrar fármacos curativos. Sin embargo muchos pacientes que se encuentran en tratamiento aprenden a servirse de algunas medicinas para -bajo supervisión médica- disminuir sus ideas obsesivas o su irritabilidad y, de esa forma allanar algunos obstáculos que surgen en la terapia.

    Cuando profundizamos en la implicación que tienen ciertos neurotransmisores y sus circuitos para alguna enfermedad que conlleva alteraciones del comportamiento, no sólo estamos comprendiendo mejor sus síntomas, también nos encontramos en disposición de elegir y combinar tratamientos farmacológicos o psicosociales más eficaces y específicos.



    Mario De Matteis y Carmen Ponce de León


  • Genética y dieta en anorexia y bulimia nerviosa

    Históricamente, los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) se han asociados con causas psicológicas, sociales y familiares. Pero en las últimas décadas la investigación científica ha aumentado nuestra comprensión de lo que ocurre en el cerebro cuando se padece un TCA, concediendo mayor importancia al papel de la herencia en el desarrollo de estas patologías.

    adnadn

    Múltiples estudios genéticos han demostrado que la tasa de anorexia, bulimia y otros trastornos de la alimentación es mayor en familiares de personas afectadas; además, los genes implicados en los síndromes alimentarios se asocian con síntomas propios de otros trastornos mentales -pero también frecuentes en los TCA- como la ansiedad, el perfeccionismo, el miedo a la incertidumbre, etc.

    Se podría decir que existe en ciertas personas una vulnerabilidad que predispone a la enfermedad. En un momento vital (casi siempre la adolescencia) en el que el organismo es más proclive a ciertos cambios hormonales y cerebrales, la dieta restrictiva actúa como factor desencadenante que, en personas con predisposición genética, puede generar un círculo vicioso, que escapa al control de la voluntad y del que es imposible salir sin recibir tratamiento específico.

    Una Unidad compuesta por profesionales de distinta formación y que ofrece diferentes modalidades de tratamiento permite abordar la Anorexia, la Bulimia Nerviosa y algunos tipos de obesidad en cada fase de la enfermedad, mediante tratamientos médicos (psiquiátricos y nutricionales), y psicológicos (psicoterapias individuales, grupales y familiares), para lograr la remisión, entendida no sólo como corrección de las conductas alimentarias anómalas, sino como mejora global de la calidad de vida.



    Mario De Matteis

Buscador de Trastornos de la alimentación
Sobre este blog

Se calcula que cada 18 meses, más de un 4% de adolescentes españolas inician conductas anoréxicas o bulímicas. El equipo de Trastornos de la Alimentación del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, liderado por la Dra. Carmen Ponce de LeónEste enlace se abrirá en una ventana nueva, quiere acompañaros y ayudaros en este camino. Intentaremos desde este blog resolver dudas y serviros de apoyo. Esperamos vuestras preguntas y sugerencias.

Archivo del blog

La finalidad de este blog es proporcionar información de salud que, en ningún caso sustituye la consulta con su médico. Este blog está sujeto a moderación, de manera que se excluyen de él los comentarios ofensivos, publicitarios, o que no se consideren oportunos en relación con el tema que trata cada uno de los artículos.

Quirónsalud no se hace responsable de los contenidos, opiniones e imágenes que aparezcan en los "blogs". En cualquier caso, si Quirónsalud es informado de que existe cualquier contenido inapropiado o ilícito, procederá a su eliminación de forma inmediata.

Los textos, artículos y contenidos de este BLOG están sujetos y protegidos por derechos de propiedad intelectual e industrial, disponiendo Quirónsalud de los permisos necesarios para la utilización de las imágenes, fotografías, textos, diseños, animaciones y demás contenido o elementos del blog. El acceso y utilización de este Blog no confiere al Visitante ningún tipo de licencia o derecho de uso o explotación alguno, por lo que el uso, reproducción, distribución, comunicación pública, transformación o cualquier otra actividad similar o análoga, queda totalmente prohibida salvo que medie expresa autorización por escrito de Quirónsalud.

Quirónsalud se reserva la facultad de retirar o suspender temporal o definitivamente, en cualquier momento y sin necesidad de aviso previo, el acceso al Blog y/o a los contenidos del mismo a aquellos Visitantes, internautas o usuarios de internet que incumplan lo establecido en el presente Aviso, todo ello sin perjuicio del ejercicio de las acciones contra los mismos que procedan conforme a la Ley y al Derecho.